La fachada de un edificio no solo es su carta de presentación, también es la primera barrera contra la lluvia, el viento y los cambios de temperatura. Y esta premisa es bastante relevante, ya que debemos tener en cuenta que, con el paso del tiempo, los materiales sufren desgaste y, si no se actúa a tiempo, los problemas estéticos pueden convertirse en fallos estructurales o de eficiencia. Para ayudarle a evitar que esto suceda, en Raver, especialistas en trabajos verticales y rehabilitación de fachadas en A Coruña, nos ocupamos de cuidar su fachada y, en caso necesario, de ejecutar la correspondiente rehabilitación.
Señales claras de deterioro en la fachada
Existen síntomas visibles en una fachada que indican la necesidad de una rehabilitación:
· Fisuras y grietas: las superficiales afectan a la estética, pero las profundas pueden comprometer la estabilidad y deben repararse con urgencia.
· Desprendimientos de materiales: son un riesgo directo para la seguridad de peatones y residentes, además de ser una señal de humedad o mala adherencia.
· Humedades, filtraciones y manchas: evidencian fallos en la impermeabilización que, si no se corrigen, dañan paredes interiores y pueden generar moho.
· Pérdida de aislamiento térmico: se traduce en un mayor consumo energético y en viviendas menos confortables.
· Desgaste generalizado: la decoloración, la suciedad incrustada o la corrosión de elementos metálicos reducen el valor del edificio y afectan a su imagen.
Pasos recomendados para rehabilitar la fachada
La primera medida es una inspección técnica profesional, que combine la observación visual con métodos avanzados, como la termografía, para determinar el alcance real de los daños. A partir de este diagnóstico podemos definir el tipo de intervención necesaria:
· Estructural, cuando la seguridad está en juego.
· Energética, centrada en mejorar el aislamiento mediante sistemas como el SATE.
· Estética, con soluciones de pintura, marmorán u otros revestimientos que renuevan la apariencia.
Mantenimiento de fachadas y normativa en vigor
¡Recuerde que la prevención es siempre la mejor inversión! Por lo tanto, revisar la fachada una vez al año y programar intervenciones cada 5-10 años es lo que ayudará a evitar reparaciones costosas. Además, no olvide que la normativa obliga a realizar la Inspección Técnica de Edificios (ITE) en construcciones con más de 50 años, lo que puede derivar en la obligación de rehabilitar la fachada si no cumple los requisitos de seguridad y conservación.
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En Raver trabajamos con diferentes soluciones de rehabilitación de fachadas en A Coruña: desde revestimientos de marmorán o pintura hasta sistemas de aislamiento térmico por el exterior (SATE). Si nos necesita, nuestro equipo de trabajos verticales se ocupará de intervenir de manera rápida, segura y sin necesidad de andamios, detalle que agiliza la ejecución y reduce costes. ¡Contacte con nosotros para que le podamos dar asesoramiento personalizado!